En una entrevista a la página web KlausCondicio, que difundió el texto, el político del ejecutivo de Silvio Berlusconi dijo que "allí donde las adopciones de parte de parejas gays son consentidas, como en Estados Unidos, pero también en Brasil, explotó la compra-venta de niños y niñas। Es algo que este gobierno no consentirá nunca y que quiero denunciar desde aquí"

Además, Giovanardi opinó que "imponer a un niño adoptado dos padres del mismo sexo significa violencia psicológica. El hecho de que haya algunas familias heterosexuales en las cuales se dan episodios de violencia o de mala educación no quiere decir que la familia normal sea fuente de violencia y de malos tratos", como afirma el parlamentario Luca Barbareschi.
De inmediato, la organización de defensa de los derechos de los homosexuales en Italia, Arcigay, pidió la renuncia del subsecretario para la Familia. "Sus declaraciones desconsideradas sobre paternidad y adopciones gay -dijo el presidente nacional Paolo Patané- demuestran que Giovanardi representa un problema para las instituciones, un problema para los ciudadanos italianos y también un peligro para sí mismo".