Y si la ONU está interesada en salvar la vida de las mujeres, sostuvieron, deben apoyar a los países sobre todo en vías de desarrollo a brindar atención médica básica, como cuidados obstétricos de emergencia, personal médico capacitado, clínicas de maternidad, antibióticos y agua limpia.
En el marco de la revisión de los 15 años de la aplicación de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, aprobada en la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer en 1995, las ONG expusieron que la situación de cada país es distinta y de acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud sólo 13 por ciento de la mortalidad materna está relacionada con el aborto inseguro, lo que significa que es prioritario atacar las causas principales que ocasionan el 87% restante, como son las hemorragias (25%), las infecciones (15%), la eclamsia (12 %) y obstrucciones en la labor de parto (8 %).
El abogado Piero Tozzi, de Prolife, Profamily Coalition, con representación en la ONU, mencionó que en la resolución se contempla la creación de una Agencia de Género para la Arquitectura de la Equidad de Género (Gender Equality Arquitecture Reform) que implicará incrementar la burocracia de las Naciones Unidas, en lugar de reforzar o hacer operativas las agencias existentes como Unifem, Unicef, Unfpa, etc.